9 oct 2012

Poema: «Elegía por un desempleado»

El mayor espectáculo del mundo eres tú,
con la mirada ausente y desdibujada en una imagen inmóvil.
Tú, fermentando en un sofá;
tú, cayendo mientras caminas en un laberinto de pasos iguales;
tú, con tu desoladora cotidianeidad,
atado a una circunstancia sin rostro o nombre auténtico.

Hueles cada día el sexo impersonal y ácido de la derrota,
te eternizas en un eco, en una réplica sonora de tu decadencia.
No hay lágrimas, no hay gritos, sólo un vacío dilatado, invisible,
que te abraza compasivamente mientras te traga,
mientras te cancela como un vulgar contrato.
¿Es que no viste la cláusula, no viste
toda esa letra pequeña, el cáncer de tu irrelevancia?
No te inquietes: tu melodrama sólo es un problema administrativo
y tus emociones, pura estadística conceptual.

Ahora tiéndete a ti mismo una
mano y rescátate, traza una mueca
sonriente, participa de la felicidad de tu inmenso Ocio,
mientras una negación paulatina y suave te elimina de la foto
y lo que queda de ti, tu fantasma, empiezas a ser tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario